THAILAND 2017 - CAP 7 - Koh Phi Phi

KOH PHI PHI

Nuestro viaje está llegando a su recta final, cuando llegamos a Bangkok el mes pasado, veíamos la vuelta muy lejos, se nos ha pasado muy rápido estos 25 días en tierras tailandesas... Hoy nos dirigimos a Koh Phi Phi, un conjunto de islas paradisiacas en medio del Mar de Andaman, famosas por la increíble playa Maya Bay, donde se rodó la película de Leonardo di Caprio, "The Beach"

Nos levantamos pronto, a las 9h sale nuestro Ferry a Koh Phi Phi, amanece lloviendo y tenemos que ponernos los chubasqueros, a nosotros y a las mochilas. Llegamos por fin al Ferry y los chubasqueros de Decathlon cumplen sobradamente su función. El billete, lo compramos la tarde de antes, cosa que recomiendo, ya que a última hora los encuentras más baratos. recomiendo siempre comprarlos en cualquier agencia local justo un día antes de la salida, los precios son mucho mejor.

El viaje transcurre tranquilo, bueno, para nosotros ya que el resto del pasaje y por culpa de las olas de 3-4 metros que nos encontramos empieza a vomitar nada más salir. El trayecto dura 1:30 h y la situación no mejora.

Llegamos a Phi Phi y después de pagar un peaje de 20 Bath por entrar a la isla comemos un trozo de pizza, y nos dirigimos al hotel. Nos alojamos en el Maiyanada Phi Phi, un hotel genial y muy económico. La verdad que lo recomendamos ya que la relación calidad-precio es sensacional.

En Koh Phi Phi, ya no llueve y la isla se ve preciosa. Viendo la isla, te das cuenta, por la situación y la geografía de la isla, de porqué el tsunami de 2004 la destrozó completamente. Una parte de ella esta completamente abierta al Océano Indico, y las olas gigantes vinieron procedente de Indonesia, directamente hacia esta zona. En la foto, la ola vino por la parte izquierda y salió por la derecha, arrasó completamente la zona donde habitaba la gente.

La tarde la dedicamos a pasear por la isla y a buscar un transporte para ir mañana a Maya Beach, la increíble y famosa de la película de Leonardo Di Caprio "The Beach". Caminamos por las calles y vemos que el ambiente ha cambiado totalmente respecto a lo que hemos visto hasta ahora en Tailandia. Todo es más turístico y más preparado para el ocio y la fiesta. Después de pasear y conocer el pueblo, cenamos en una restaurante occidental, pizza y pasta.

Durante la tarde hemos preguntado en varias agencias para hacer la excursión a Maya Bay pero nos dicen que el tiempo no es bueno y no sabe si saldrán los barcos. Decidimos madrugar al día siguiente y preguntar directamente a los gitanos del mar, que es como llaman a los aborígenes que disponen de las embarcaciones típicas tailandesas, los Long Trail. En el Ferry a Phi Phi, hemos conocido unos chicos de Alicante, que junto a Arnau, el otro chico catalán de Ao Nang, decidimos hacer el tour conjunto.

Nos levantamos pronto y el día parece bueno, vamos a puerto a negociar con los gitanos del mar, y por 2500 Bath conseguimos un tour de 4 horas en Maya Bay, snorkel en una bahía y visita a la Monkey Beach. Un precio muy bueno, la verdad, 63€ por 8 personas.

Salimos y el viaje parece tranquilo, aunque nada más lejos de la realidad, a la que salimos a mar abierto, el viento y la corriente viene directamente del Océano Indico hacia nosotros. La verdad que navegar con esta embarcación tan pequeña, con olas de unos 2 mts, no es realmente lo que teníamos pensado que nos encontraríamos. La situación se complica por momentos y se hace un poco largo el llegar a Koh Phi Phi Lee, que es donde se encuentra la paradisiaca playa de Maya Bay. Judit está bastante intranquila, pero yo veo que el aborigen controla bastante, lleva haciendo esto desde pequeño.

Antes de llegar nos dice el capitán que por el temporal no puede entrar a la playa y que nos dejará en otro lugar que hay 5 minutos caminando, nosotros no lo vemos un problema y nos dirigimos a la zona. Llegamos y nos encontramos un acantilado de unos 5 metros de altura, con una especie de red de cuerda para poder subir. La verdad que a simple vista no parece peligroso, pero de nuevo, nada más lejos de la realidad. La barca echa el ancla a unos 10 metros de las rocas y nos dice que ya podemos tirarnos al agua y subir. Las olas, que siguen siendo de 1,5 mts llegando a 2 en algunos momentos, rompen con fuerza contra las rocas, haciendo difícil el acceso.

Los primeros en tirarse al agua son los niños, y comienzan a nadar hacia las rocas. Hay una cuerda y consiguen agarrarse a ella, Arnau y yo vamos detrás y les vamos ayudando, hacemos lo que podemos, ya que para nosotros también se hace complicado. Yo me golpeo las piernas con las rocas del fondo y comienzan a sangrar bastante. La primera en llegar a rocas es Leire y cuando se dispone a subir, una ola increíble rompe encima de ella y la lanza contra las rocas. Yo le grito enseguida que no se suelte de la cuerda por nada del mundo, y ella así lo hace, se aferra a ella evitando así un golpe que podía haber acabado en tragedia. Desde aquí quiero agradecer a Arnau toda la ayuda recibida.

Ahora es el turno de Aleix, le pasa algo similar, pero la ola es algo más pequeña y la supera sin problemas. Una vez hemos llegado comenzamos a subir por las cuerdas y llegamos a la parte superior del acantilado. Una vez pasado esto, hacia la playa tenemos 3-4 minutos caminando y pagando una tasa de unos 400 Bath por persona.

La playa es increíble, si pudiera describir lo que significa un paraíso para mi, sin duda seria este lugar.  Forma una bahía de forma casi circular, solo una pequeña entrada queda en un extremo. Nos quedamos una horita para hacer fotos y darnos un baño. estando en el agua, pasan por al lado mío unas crías de tiburón de punta negra, son pequeñas pero casi llegan a los 80 cm. La verdad, que el haber venido hoy, con mala mar, ha hecho que podamos disfrutar de Maya Bay casi vacía, una cosa casi imposible desde que se hiciera famosa en la película de Di Caprio.

Salimos de la playa, y al haber bajado la marea se nos hace más fácil, lo hacemos por un agujero que antes quedaba sumergido en el agua. Ahora nos dirigimos a una bahía a hacer snorkel. Es increíble la cantidad de peces que vemos, amarillos a rayas son los más numerosos pero los hay azules, negros, naranjas, etc... Aleix disfruta muchísimo y nos pide incluso que quiere hacerlo con botella de oxigeno. Leire no tanto, tal gran cantidad de peces le asusta un poco.

Ahora nos dirigimos a otra isla, a la Monkey Beach, que como su nombre indica es una playa llena de monos. Llegamos y hay muchísimos barcos, pero la visita y ver esos animalillos tiene su gracia. Nada más pisar la arena, vienen decenas de monos en busca de comida. Nos hacemos cientos de fotos con ellos y damos por finalizada la excursión. Llegamos a puerto, nos comemos unas pizzas y nos vamos a descansar al hotel.

Por la tarde los niños y Judit se quedan en la piscina y yo me voy con Arnau a subir a la cima más alta de la isla. La subida se hace un poco pesada, sobre todo por la calor y la humedad que hay. Una vez arriba, las vistas son increíbles, el esfuerzo ha valido la pena.

Ya es hora casi de cenar y he quedado con Judit y los niños en el puerto, nos dirigimos a una marisquería a comer gambas, son muy ricas y a muy buen precio. Cenamos y vamos a la playa, hacen unas fiestas que estás muy bien, con espectáculos de fuego y música en la arena.

Ultimo día en Phi Phi, mañana pronto salimos para Phuket. Nos levantamos y vamos a pasar el día a Long Beach, una playa de la isla que suele estar muy tranquila. desde el hotel cruzamos el pueblo y nos adentramos en la selva. Caminamos una media hora, llegamos a Long Beach. La playa es increíble y no hay casi gente, como casi todas las de aquí, es de arena blanca (coral) y aguas turquesas. Hemos quedado para comer aquí con unos chicos de Madrid que conocimos en Ao Nang, como todavía no han llegado, aprovechamos para darnos un bañito.

Al rato llegan nuestros amigos madrileños, una personas excelentes por cierto, y hacemos unas cerveceras antes de comer, los peques siguen a lo suyo en el agua. Comemos comida Thai y Noe echamos unas risas. La verdad, que ha sido un inmenso placer compartir el día con ellos, lo hemos pasado genial. Después de comer, ellos se quedan en la playa y nosotros decidimos ir al hotel, los peques quieren ir a la piscina y nosotros a descansar un rato y hacer las mochilas.
Sobre la 20h nos vamos a cenar y a la fiesta de la playa del día anterior. Después de un rato disfrutando de los espectáculos nos vamos a dormir.

Hoy cogemos un Ferry para desplazarnos a Phuket, allí pasaremos un solo día para ir a koh Tapu, la famosa isla que sale en la película de James Bond "El hombre de la pistola de oro". También desde Phuket cogemos el avión de vuelta a Bangkok para ya volver a casa.

A las 9h cogemos el ferry y en 2 horas entramos en el puerto de Phuket, nos dirigmos al hotel y vamos a pasear y a ver la puesta de sol en la famosa playa Patong Beach. El ambiente que nos encontramos es el que menos nos gusta de todo el viaje, mucha fiesta, alcohol y drogas, muy parecido al ambiente que te encuentras en Salou y Lloret en los meses de verano. La fiesta de noche es increíble, música a todo trapo, camionetas con un ring en el tejado con luchadores de Mu Thai, Tuk Tuk tuneados mas propio de la  película "Fast & Furius" que de una isla Tailandia, gente cantando por las calles, chicos y chicas con poca ropa por todos los lados mostrando su cuerpo "10", etc... En fin, no es el tipo de turismo que estamos buscando, cenamos algo y nos vamos al hotel a descansar. Aunque tenemos que decir que la puesta de sol de Patong Beach, fue espectacular.

Al día siguiente en "Van" nos vamos al norte, a Koh Tapu. Llegamos al Parque Natural de Ao Phang-nga. Es una espectacular bahía y una maravilla geológica llena de islotes, cuevas sumergidas y formaciones calcáreas completamente verticales que sobresalen del mar.

Cogemos el barco y podemos disfrutar de esta maravilla geológica, columnas de roca de mas 50 metros de altura, cuevas en las que se puede entrar cuando baja la marea. Paramos en Koh Tapu, donde se encuentra el monolito de 20 metros de altura famoso por la película de James Bond y en numerosos anuncios de tv. Es una sensación increíble poder estar delante de maravilla de la naturaleza, hemos estado ya en muchas, pero esta es realmente especial. Después nos dirigimos a comer a un precioso pueblo flotante en medio de la laguna, y después ya a puerto para dirigirnos a Phuket de nuevo.

Volvemos a Bangkok, donde pasamos una noche para visitar el Palacio Real y coger avión de vuelta a casa....

Os dejamos el video de nuestro paso por Koh Phi Phi: