BALTICO Y RUSIA 2016. Cap. 6 - Moscú (Rusia)

MOSCÚ

Ya estamos en Moscú, la capital de Rusia desde 1918, después de la Revolución Rusa y cuando se formó la URSS. 

Después de dejar las maletas en el hotel, nos dirigimos al Convento Novodevichy, el cual a diferencia de muchos conventos rusos ha pertenecido intacto desde el s. XVII. Ya tenemos un plano más actualizado del metro y. sin maletas, ya nos organizamos mejor con las estaciones en ruso. Llegamos enseguida al convento.

Es el primer convento ortodoxo que visitamos, y todo nos resulta muy curioso. Las vestimentas son algo diferentes, y por dentro, las zonas de culto también. Damos un paseo por todas las instalaciones y podemos ver el día a día de las monjas y los sacerdotes; leyendo, orando, paseando.... Todo esto resulta curioso y enriquecedor. A pesar de ser completamente ateo, me llaman mucho la atención las diferentes religiones, sobre todo a nivel cultural. 

Ahora nos dirigimos al hotel de nuevo. Esta mañana era demasiado pronto y no tenían nuestra habitación preparada. Comemos algo en una zona comercial de la parte financiera de Moscú y hacemos el "cheking". Nuestro hotel se llama Novotel Moscow City, la verdad es que, en relación calidad- precio, es muy recomendable. Decidimos descansar un rato y sobre media tarde nos dirigimos a la Plaza Roja.

       

Ligeros Viajeros en Catedral Ortodoxa de San Basilio

 Mausoleo de Lennin

 

El Kremlin de noche

Llegamos a la Plaza Roja, y nos encontramos totalmente emocionados. Estamos en la capital del este en la guerra fría, el centro del comunismo mundial y de la iglesia ortodoxa. Tenemos el Krenlim delante, esa fortificación que tantas veces hemos visto en películas de espías, la tenemos ante nuestros ojos y la sensación es increíble. Al fondo de la plaza, vemos la Catedral de San Basilio, es impresionante. La miras y parece dibujada con acuarelas, con esos colores tan vivos que hacen que luzca preciosa. Puedo decir que es uno de los monumentos más bonitos que hemos visto en nuestras vidas. La verdad, que lo que hemos sentido esta tarde, no se puede describir, una ilusión cumplida, un sueño hecho realidad, y en estos momentos doy gracias a la vida por haberme dejado estar aquí junto a mi familia. También en la Plaza Roja, está el centro comercial GUM que data del año 1890 y, ya de noche, con toda la fachada iluminada, luce precioso. Después de tan intenso y emocionante día, cenamos algo en los puestecillos callejeros y nos vamos a descansar al hotel.

Nos levantamos sobre las 9h, y después de un buen desayuno nos vamos visitar el Kremlin. Entre unas cosas y otras, llegamos a las 11:30h y nos dirigimos a las taquillas para comprar las entradas. Hay una cola inmensa, pero en media hora ya las tenemos. Acto seguido nos disponemos a entrar y nos encontramos otra cola mucho más grande. Cuando ya nos toca nos encontramos un control de seguridad idéntico al que te encuentras en un aeropuerto. Yo, que siempre llevo una navaja multiusos suiza encima, me la detectan enseguida y me obligan a salir del recinto. Me explican, o eso entiendo, que fuera hay una consigna. Mi familia si que consiguió entrar, y yo fui a buscar la consigna que en ruso-english me explicó el policía. Justo al final de la cola veo la consigna, dejo gratuitamente la navaja y para mi sorpresa veo que tengo que hacer cola de nuevo. Intento explicar a la multitud lo que me ha pasado para que me dejen avanzar, y entre los que no me entienden y los que no me quieren entender, veo que voy a tener que hacer la cola de nuevo. En unos segundos, decido que no, que no es justo, que voy a intentar pasar por delante de unas 100 personas. Con decisión y mucho empeño voy pasando los 50 metros de gente apelotonada, que incluso me abucheaban y hacían fuerza para que yo no pudiera pasar. A pesar de todo, consigo llegar de nuevo al control y por fin me reúno con mi familia de nuevo.

Una vez dentro, y viendo como tienen todo montado, te das cuenta de que estás en una de las construcciones mas seguras del planeta, Incluso si te sales de la ruta establecida, sale un policía de no sé donde con un silbato para llamarte la atención. Yo lo pude comprobar en persona, je je.

El Cañon Tsar Pushka y la Campana Tsar Kolokol. Tanto uno como otro los más grandes del mundo y nunca fueron utilizados por sus grandes dimensiones.

La Plaza de las Catedrales del Kremlin

Visitamos los jardines, las catedrales y algunos monumentos. también nos encontramos el Senado Ruso y el Gran Palacio del Kremlin, el lugar de trabajo del presidente.

Ya es la hora de comer, salimos por una de las puertas del Kremlin que da directamente a la Plaza Roja. Hay una zona de mercado con puestecillos de comida rápida y en uno de ellos nos disponemos a comer.

La tarde la dedicamos a visitar la impresionante Catedral de San Basilio por dentro. Es muy colorida, siguiendo la tónica de su exterior. No es una iglesia normal, esta dividida en infinidad de salas pequeñas con sus paredes llenas de frescos y mosaicos muy cargantes. En una de las salas, hay una coral que están cantando opera para el deleite de los visitantes. Después de disfrutar de esta sensacional visita, salimos hacia nuestro próximo destino.

Nos dirigimos ahora en el Centro Comercial GUM, El edificio data de 1890. Hasta la Revolución Rusa habían hasta 1200 tiendas y eran todas privadas. Luego Stalin lo nacionalizó y posteriormente lo utilizó como oficinas y mausoleo. En 1953 lo volvieron a utilizar como Centro Comercial nacionalizado y con la disolución de la URSS se privatizó completamente.

Entramos y nos encontramos un militar con metralleta y un arco de seguridad en la puerta, pasamos sin problemas. Por dentro es espectacular, es antiguo pero con cierto nivel y claramente dirigido a un público adinerado. Hacemos algunas compras y merendamos unos helados.

Sobre las 19h nos dirigimos al hotel de nuevo para cenar por la zona financiera, hay McDonalds, Lizarran, Burguer, etc... En uno de esos restaurantes cenamos y nos vamos al hotel a descansar.

Nos levantamos como siempre, sin prisas, el viaje está llegando a su fin y el cansancio apremia. Nos vamos a visitar una de las 7 hermanas de Moscú. Son 7 rascacielos increíblemente grandes, de un estilo barroco, ruso y gótico, que se construyeron en plena Guerra Fría para luchar contra el imperialismo americano en la construcción de rascacielos. El que visitamos nosotros es el Ministerio de Exteriores y tiene una atura de 172mts.

 Ministerio de Asuntos Exteriores

Simbología comunista en la fachada

Ahora nos dirigimos a una calle peatonal muy bonita, completamente llena de adornos florales y de tiendas de souvenirs. Aprovechamos para gastar los últimos rublos que nos quedan. Llegamos de nuevo a la Plaza Roja para comer algo. Es sábado y hace un día espectacular, está todo repleto de gente paseando. Nosotros hemos tenido suerte, ya que el grueso de las visitas ha sido entre semana y había muy poquita gente.

La tarde la dedicamos a visitar las increíbles estaciones de metro que, como en San Petersburgo, parecen palacios. Stalin hizo construir las estaciones para que la riqueza llegara al pueblo.

Vamos al hotel a descansar y a las 2h de la madrugada nos recoge un taxi para ir al aeropuerto, nuestro avión sale a las 6h de la mañana.

Ya en el avión, volando hacia Barcelona, me doy cuenta del increíble viaje que hemos realizado. Parece que hace semanas cuando visitamos Letonia, nuestro primer destino de esta gran aventura. Haciendo recapitulación sobre este viaje, puedo decir que la familia está más unida todavía que antes. Hemos pasado momentos geniales, momentos no tan buenos y otros que incluso lo hemos pasado un poco mal, pero toda esta experiencia ha servido para crecer como personas, He visto un cambio importante en mis hijos, los veo más preparados para afrontar retos, responsables de sus actos y poco a poco adquiriendo más resiliéncia. Durante el viaje han ido vaciando su mochila llena de prejuicios y de miedos, los veo que se están preparando con creces para afrontar la vida cuando sean mayores.

Os dejamos el video de Moscú en nuestro canal de Youtube:

https://www.youtube.com/watch?v=8wJWTOcbC-k